La integración de niños y jóvenes con discapacidad visual en las escuelas regulares implica, un compromiso de todos, esto incluye el tener una buena relación a nivel de la familia, escuela y comunidad, a través de ellos los niños y jóvenes ciegos logran su fortalecimiento vital; Se requiere la apertura a estilos de vida diferentes, así como el respeto a la diversidad, que es indicativo de valores subyacentes, que constituyen un reflejo de la permeabilidad y democratización de diferentes instancias sociales en un momento histórico determinado. Como forma de contribuir a que la participación de estos niños sea adecuada, se presentan algunos consejos para tener presentes, tanto para relacionarse con ellos, como para entregar un entorno seguro: • En primera instancia se debe mostrar una actitud de respeto, para los cual se debe: preguntar antes de ofrecer ayuda, no forzar a recibir una ayuda no necesaria y evitar la sobre
Comentarios
Publicar un comentario